El pasado mes de agosto desde el grupo municipal PODEMOS-EQUO en el Ayuntamiento de Graus alegamos contra la ampliación de la granja porcina de cebo de Pueyo de Marguillén, la cual pretende incrementar el número de cerdos hasta 5.300. Ecologistas en Acción Ribagorza, SOS Ribagorza, un vecino de Pueyo, 110 usuarios de la Base Náutica y Aquaservice también presentaron alegaciones.
En líneas generales nos oponemos por: el desnivel del relieve es del 9,1%, facilitando que el contaminante de los purines llegara a los acuíferos; no hay distancia necesaria; se ubicaría en el perímetro de protección de las 4 áreas de la planta de Aguas de Ribagorza; no hay agua suficiente; la balsa de purines, que acabarían en el pantano, estaría muy próxima al barranco del Cepillo, al lado de la Base Náutica.
Por ello, solicitamos que se nos conceda la condición de afectado y que se deniegue la solicitud de autorización de obras correspondientes a la ampliación.
Estamos convencidos de que esto no tiene mucho que ver con la construcción o el diseño de un territorio realmente sostenible para todos y para quienes nos visitan, pues hace unos meses conocimos la contradictoria noticia de que “Graus será escenario de un proyecto piloto de turismo sostenible”.
Capella, Estadilla, Fonz, Graus, Secastilla, Lascuarre, La Puebla de Fantova han sido declaradas zonas vulnerables de Nitratos ¿Turismo sostenible pues? ¿A qué precio medioambiental se construyen estas granjas? Pan para hoy y hambre para mañana.
Os adjuntamos la alegación presentada:
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